Dragón de Fuego
Del 3 de febrero de 1916 al 22 de enero de 1917Del 31 de enero de 1976 al 17 de febrero de 1977
Los Dragón son los más excéntricos de todo el Zodíaco Chino. Encumbrados en lo más alto de su sereno paraíso, pueden ser tozudos, apasionados, excitables, honestos y valientes, ir pintados de púrpura o meterse descalzos en las fuentes públicas. Solamente escuchan su propio ritmo, mientras el resto del mundo les contempla atónito, muchísimas gracias. La gente siempre admira su individualidad y su personalidad festiva. Los Dragón son capaces de realizar un excelente trabajo para la humanidad e inspiran confianza prácticamente en todo el mundo. El Dragón simboliza la vida y el desarrollo, y se dice que aporta las cinco bendiciones: armonía, virtud, riqueza, satisfacción y longevidad.
La sopa de pollo y los brotes de bambú son las claves para su buena salud.
Absolutamente electrificantes, los Dragón de Fuego emanan vigor y energía. Estos líderes naturales sonríen ante la adversidad, convierten a los que se quejan en optimistas y hay en su vida tanta inspiración como en una Sonata de Beethoven. Son personas honradas en su trato con los demás y, con frecuencia, son requeridos para que medien en las disputas. Como se preocupan tanto por la gente, a los Dragón de Fuego les gusta apoyar causas benéficas y reunir a sus amigos en elegantes veladas. Estos Dragón están llenos de ambición, incansable entusiasmo e inteligencia y, como resultado, suelen realizar destacadas carreras profesionales. A pesar de todo el dinero que ganan, las Finanzas siguen siendo para ellos la asignatura pendiente. El dinero les llega de forma fácil y les abandona de la misma forma, y hasta que llegan a controlar sus hábitos de gasto, el dinero se les va como el agua. Con su romanticismo característico, los Dragón de Fuego no pueden evitar jugar a casamenteros. Y además, ¡tienen mucha suerte! En cuanto a sí mismos, rezuman un gran carisma y nunca necesitan a nadie que les organice esos asuntos. Los Dragón de Fuego tienen éxito en el amor, a menudo son realmente adorados, y además de ser atractivos tienen un temperamento ardiente. El sexo opuesto se siente seguro con ellos.
Del 3 de febrero de 1916 al 22 de enero de 1917Del 31 de enero de 1976 al 17 de febrero de 1977
Los Dragón son los más excéntricos de todo el Zodíaco Chino. Encumbrados en lo más alto de su sereno paraíso, pueden ser tozudos, apasionados, excitables, honestos y valientes, ir pintados de púrpura o meterse descalzos en las fuentes públicas. Solamente escuchan su propio ritmo, mientras el resto del mundo les contempla atónito, muchísimas gracias. La gente siempre admira su individualidad y su personalidad festiva. Los Dragón son capaces de realizar un excelente trabajo para la humanidad e inspiran confianza prácticamente en todo el mundo. El Dragón simboliza la vida y el desarrollo, y se dice que aporta las cinco bendiciones: armonía, virtud, riqueza, satisfacción y longevidad.
La sopa de pollo y los brotes de bambú son las claves para su buena salud.
Absolutamente electrificantes, los Dragón de Fuego emanan vigor y energía. Estos líderes naturales sonríen ante la adversidad, convierten a los que se quejan en optimistas y hay en su vida tanta inspiración como en una Sonata de Beethoven. Son personas honradas en su trato con los demás y, con frecuencia, son requeridos para que medien en las disputas. Como se preocupan tanto por la gente, a los Dragón de Fuego les gusta apoyar causas benéficas y reunir a sus amigos en elegantes veladas. Estos Dragón están llenos de ambición, incansable entusiasmo e inteligencia y, como resultado, suelen realizar destacadas carreras profesionales. A pesar de todo el dinero que ganan, las Finanzas siguen siendo para ellos la asignatura pendiente. El dinero les llega de forma fácil y les abandona de la misma forma, y hasta que llegan a controlar sus hábitos de gasto, el dinero se les va como el agua. Con su romanticismo característico, los Dragón de Fuego no pueden evitar jugar a casamenteros. Y además, ¡tienen mucha suerte! En cuanto a sí mismos, rezuman un gran carisma y nunca necesitan a nadie que les organice esos asuntos. Los Dragón de Fuego tienen éxito en el amor, a menudo son realmente adorados, y además de ser atractivos tienen un temperamento ardiente. El sexo opuesto se siente seguro con ellos.